Miércoles 25 de diciembre de 2024
Redacción
Muchas marcas que proveen diversidad de productos en Guatemala han empezado a implementar diferentes estrategias, incluyendo cambios en el volumen y peso de sus presentaciones, ante la inflación y las alzas en las materias primas.
Algunas empresas optan por reducir la presentación de sus productos o los formatos a fin de no subir el precio nada o mucho, otras decidieron producir unidades con mayor volumen o paquetes con varias unidades, ya que los compradores buscan ahorros en ambas opciones.
El jefe de la unidad de inteligencia de mercados de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), Jacobo Pieters, asegura que la disminución del volumen o peso de las unidades se conoce como shrinkflation (o reduflación) y comienzan a identificarse casos en el país.
Esto se debe a que cuando la fabricación de un producto se encarece, las respuestas del empresario pueden ser varias como el aumento del precio que cobra al consumidor, que para algunos es la última opción, y, de manera discreta, van reduciendo poco a poco el tamaño de los productos para invertir menos insumos sin perder mercado o dejar de abastecer.
Esta estrategia se usa durante condiciones complicadas o de crisis, principalmente en productos de consumo masivo como los cereales y granos básicos, el pan, artículos de cuidado personal, carnes, chocolates, dulces y alimentos procesados como enlatados o conservas, e incluso algunos alimentos instantáneos, explicó Pieters.
Por otro lado, el vocero de la Dirección de Atención y Asistencia al Consumidor (Diaco), Carlos Vásquez, indicó que vender productos que no contengan la cantidad, calidad o peso que se indica en el etiquetado es ilegal.