Jueves 26 de diciembre de 2024
AFP | por Patrick GALEY
Cambiar el régimen alimenticio de los animales en las granjas y las piscifactorías permitiría alimentar hasta mil millones de personas suplementarias, según un informe publicado este lunes.
El ganado y el pescado destinados al consumo humano se nutren de cereales, leguminosas e incluso ciertos tipos de pescado que podrían ser utilizados para alimentar a los seres humanos.
El estudio realizado por investigadores de la Universidad Aalto de Finlandia analizó los datos de la producción agropecuaria mundial, así como de otras fuentes alternativas de pienso para los animales.
Globalmente, el 49 % del pienso utilizado en la piscicultura, el 68 % del que consumen las aves y el 38 % en las explotaciones porcinas está compuesto de alimentos que podrían ser utilizados para alimentar a los humanos.
De los seis mil millones de toneladas de pienso para animales, un 15 % podría ser consumido directamente por humanos.
En términos de calorías, esa reutilización significaría un aumento de la oferta del 13 %, y en términos de proteínas, un aumento del 15 %.
“Eso representa aproximadamente mil millones de personas”, explicó a AFP la principal autora del informe publicado en Nature Food, Vilma Sandstrom.
Según su equipo de investigadores, los animales y peces podrían contentarse de paja, hojas, azúcar de remolacha, semillas y restos no consumibles para los humanos, como huesos de animales.
“Muchos de esos productos simplemente se pudren en los campos o son desechados”, aseguró Sandstrom. “No están inemdiatamente disponibles para los aninales, pero representan un potencial”, añadió.
La producción de carne representa el 14 % de las emisiones de gases de efecto invernadero y las granjas utilizan en la actualidad 3/4 partes del consumo de agua en el planeta.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, advirtió en julio que la invasión rusa de Ucrania, que coincidió con la frágil situación de las cadenas alimentarias en todo el mundo tras la epidemia del covid-19, podrían desencadenar “una crisis de hambruna sin precedentes”.