Miércoles 25 de diciembre de 2024
Los salvadoreños han demostrado una confianza renovada en el sistema bancario del país, como lo reflejan las cifras del primer trimestre de 2024 reportadas por la Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa). Durante este periodo, la cartera de depósitos administrada por los 12 bancos más grandes de El Salvador creció un 4.2 % interanual, alcanzando un total de $17,553 millones, lo que representa un aumento de $709.4 millones en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Abansa destacó que los depósitos pactados a más de un año plazo experimentaron el mayor crecimiento, con un aumento del 44.2 %. Estos depósitos, que no pueden ser retirados antes de la fecha de vencimiento y ofrecen una tasa de interés mayor, alcanzaron un total de $763.4 millones, lo que significa $234.2 millones adicionales respecto al primer trimestre de 2023.
Por otro lado, los depósitos pactados hasta un año plazo sumaron $5,703.6 millones, superiores en $217.5 millones (un 4 %) frente al mismo período en 2023. La mayor concentración de la cartera se mantiene en los depósitos a la vista, que sumaron $10,766.2 millones en el primer trimestre de 2024, con un crecimiento del 2 %, equivalente a un incremento de $211.2 millones respecto al año pasado.
Los depósitos a plazo también mostraron un crecimiento notable, aumentando en $451.6 millones, un 7.5 %, para superar los $6,467.1 millones a marzo de 2024. Asimismo, los depósitos restringidos e inactivos, que incluyen los embargados por acción judicial, sumaron $319.7 millones, con un crecimiento del 17.1 % respecto al primer trimestre de 2023.
En cuanto al ranking de los bancos en la cartera de depósitos, Bancoagrícola lidera con un 25.1 %, seguido por Cuscatlán de El Salvador con un 17.2 %, BAC Credomatic con un 14.7 % y Davivienda con un 13.3 %. Otros bancos como Hipotecario, Promérica, Atlántida, Azul El Salvador, Industrial, Fomento Agropecuario, Citibank N.A. y Abank también muestran participaciones menores en el mercado de depósitos.
Este crecimiento en la cartera de depósitos refleja una mayor confianza de los salvadoreños en el sistema bancario y su disposición a invertir en productos financieros que les ofrecen seguridad y rentabilidad.