La dirección de la fábrica de Audi en Bruselas ha dado un ultimátum a los trabajadores para que devuelvan antes del mediodía de mañana, lunes, las llaves de 200 automóviles de lujo que fueron “confiscadas” el jueves. En caso de no recibir las llaves a tiempo, la empresa advierte que tomará acciones legales contra los empleados implicados.
Los sindicatos explicaron que las llaves fueron guardadas en un “lugar seguro” después de que el personal decidiera retenerlas como protesta ante la incertidumbre sobre el futuro de la fábrica. Esta medida se tomó tras conocerse que el Grupo Volkswagen no tiene planes de asignar un nuevo modelo para la planta de Bruselas, según informes de medios belgas.
La decisión de Volkswagen de cesar la producción del Audi Q8 e-tron, el único modelo fabricado en la planta, ha desatado una serie de protestas. A principios de julio, la empresa anunció una reestructuración que implicará el despido de aproximadamente 1.500 trabajadores. Los sindicatos consideran inaceptable la noticia de que no se asignará ningún modelo a la fábrica en los próximos años y tenían previsto comenzar negociaciones con la empresa después del período estival.
Las proyecciones indican una drástica reducción en la producción del Q8 e-tron, con una caída del 60 % en 2024 y del 70 % en 2025. Se prevé que la producción del modelo cesará por completo en 2025, con ninguna unidad fabricada en 2026 y 2027.
El miércoles pasado se esperaba la reanudación parcial de la producción tras un permiso colectivo remunerado, pero los trabajadores optaron por no regresar a sus puestos tras el anuncio del martes sobre la falta de un nuevo modelo.
La dirección de la fábrica ha advertido que si las llaves no son devueltas antes del mediodía del lunes, presentará una denuncia penal, basándose en las imágenes de las cámaras de seguridad para identificar a los responsables. Los trabajadores también tienen previsto manifestarse el 16 de septiembre en protesta por la situación.
