En los últimos días, la frontera de El Amatillo, ubicada en Pasaquina, La Unión, se ha convertido en un punto clave de ingreso para miles de turistas hondureños que visitan El Salvador durante sus vacaciones por la Semana Morazánica. Estos turistas han resaltado la rapidez y eficiencia con la que el personal de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) realiza los trámites migratorios.
Varios de los visitantes mencionaron los largos tiempos de espera de hasta cuatro horas que experimentaron en su salida de Honduras, mientras que al cruzar a El Salvador, destacaron que el proceso fue mucho más ágil y moderno. Un turista hondureño compartió su experiencia en redes sociales: «Aquí, en la Aduana de El Salvador, el proceso fue mucho más rápido. Ni siquiera tuvimos que bajarnos del vehículo; los agentes de migración se acercaron para hacer el chequeo en menos de cinco minutos, y veníamos seis personas, tres de ellas menores. Esto es una muestra de que cuando las cosas se quieren hacer bien, se puede».
Además de destacar la profesionalidad de los agentes migratorios salvadoreños, muchos de los turistas decidieron extender su estadía para disfrutar de los atractivos turísticos de La Unión y la zona oriental del país, mientras que otros exploraron destinos en la zona central y paracentral. Los visitantes también afirmaron sentirse seguros durante su recorrido, lo que ha contribuido a su experiencia positiva en el país.
