Sábado 21 de diciembre de 2024
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha advertido que prohibirá las apuestas deportivas en internet si la regulación no logra mitigar la creciente “adicción” que afecta a muchos brasileños. Su gobierno busca frenar el impacto negativo de estas apuestas en los ingresos de los hogares, que ha llevado a la quiebra a numerosas familias y reducido el consumo en el país.
Desde la legalización de las apuestas deportivas en 2018, los brasileños, especialmente aficionados al fútbol, se han volcado masivamente a esta práctica. Sin embargo, estudios financieros recientes revelan que estas apuestas están afectando gravemente la economía familiar, especialmente entre los sectores más vulnerables.
“Si la regulación no funciona, no dudaré en prohibir definitivamente las apuestas”, declaró Lula tras emitir su voto en las elecciones municipales de Sao Paulo. El mandatario calificó de inaceptable que familias de bajos ingresos, que reciben ayudas a través del programa Bolsa Familia, utilicen esos recursos para apostar.
Recientemente, la Secretaría de Premios y Apuestas (SPA) de Brasil publicó una lista de aproximadamente 200 empresas de apuestas deportivas con licencia para operar en el país. Entre ellas se encuentran grandes nombres de la industria, como Flutter Entertainment, el grupo Entain —propietario de Ladbrokes—, y la sueca Betsson AB. Las empresas están obligadas a establecer oficinas en Brasil y contar con un socio local. Además, la normativa prohíbe el uso de tarjetas de crédito en las apuestas. Cientos de empresas han sido rechazadas por no cumplir con las regulaciones del país.