El Gobierno de Venezuela, bajo la administración de Nicolás Maduro, expresó este jueves su rechazo al veto de Brasil que impide su ingreso al bloque de economías emergentes BRICS, calificando esta decisión como un “gesto hostil” y una “agresión” contra los intereses venezolanos. En un comunicado emitido por la Cancillería venezolana, el gobierno de Maduro manifestó que esta medida “reproduce el odio, la exclusión y la intolerancia impulsados desde los centros de poder occidentales” y representa una barrera para el ingreso de Venezuela a la organización.
En el comunicado, Caracas sostiene que “ninguna artimaña o maniobra contra Venezuela detendrá el curso de la historia” y afirma que su ingreso contaba con el respaldo de otros países participantes en la cumbre de los BRICS, celebrada en Rusia entre el 22 y el 24 de octubre. Sin embargo, según el documento, la Cancillería brasileña decidió mantener el veto impuesto por el expresidente Jair Bolsonaro, lo que ha generado indignación en el pueblo venezolano, que considera esta medida “inexplicable e inmoral”.
Celso Amorín, excanciller y asesor del Gobierno brasileño, había anticipado que la administración de Luiz Inácio Lula da Silva no promovería la inclusión de Venezuela en el bloque conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Las relaciones entre ambos países se han tensado especialmente tras las elecciones venezolanas del 28 de julio, cuyos resultados fueron cuestionados por varios gobiernos, incluido el de Lula da Silva.
