Domingo 5 de enero de 2025
Boeing se perfila como el mayor perdedor del índice Dow Jones en 2024, con una caída del 32% en el valor de sus acciones, mientras su rival Airbus registra un incremento del 11% y el S&P 500 avanza más de un 23%.
El año comenzó con un precio de 257,50 dólares por acción, pero un incidente el 5 de enero, donde un panel de cabina de un 737 MAX recién entregado sufrió un fallo en pleno vuelo, marcó el inicio de una serie de problemas. La Administración Federal de Aviación (FAA) limitó la producción del 737 a 38 unidades mensuales debido a preocupaciones de seguridad y calidad, afectando aún más las operaciones de la empresa.
Boeing también enfrentó desafíos relacionados con problemas en la cadena de suministro, una huelga de siete semanas y la necesidad de un acuerdo de 4.700 millones de dólares para adquirir Spirit AeroSystems, un proveedor clave en la fabricación de fuselajes.
En agosto, Kelly Ortberg asumió como presidenta ejecutiva, pero enfrentó una huelga masiva de trabajadores de producción que duró hasta noviembre. Durante ese tiempo, Boeing anunció un plan para reducir su plantilla en un 10% y señaló que seguirá enfrentando pérdidas financieras en 2025.
Aunque las acciones repuntaron ligeramente en diciembre tras el reinicio de la producción del 737, cerraron el martes en 177 dólares, lejos de los niveles con los que inició el año.
