Jueves 9 de enero de 2025
La actividad en el sector de servicios de Estados Unidos (EE.UU.) se aceleró en diciembre, aunque el aumento de una medida de los precios pagados por insumos se acercó a su nivel más alto en casi dos años, lo que sugiere una inflación elevada. Este panorama coincide con la expectativa de la Reserva Federal (Fed) de reducir menos las tasas de interés durante este año.
Según el Instituto de Gestión de Suministros (ISM), el índice de gerentes de compras (PMI) del sector no manufacturero subió a 54.1 puntos en diciembre, desde 52.1 puntos en noviembre, impulsado por una fuerte demanda. Los economistas consultados por Reuters habían anticipado que el PMI del sector servicios alcanzaría 53.3 puntos.
Un PMI superior a 50 puntos indica expansión en el sector de servicios, que representa más de dos tercios de la economía estadounidense. El ISM señala que los índices PMI superiores a 49 puntos indican generalmente un crecimiento económico sostenido.
El aumento del PMI se suma a otros datos sólidos, como el gasto en consumo, que apuntan a un buen desempeño económico en el cuarto trimestre. Además, el ISM reportó la semana pasada que su PMI manufacturero alcanzó su nivel más alto en nueve meses en diciembre.
La confianza empresarial ha mejorado tras la victoria electoral del presidente electo, Donald Trump, en noviembre, con expectativas de recortes fiscales y un entorno regulatorio más flexible. Sin embargo, persisten preocupaciones sobre otras promesas políticas de la nueva administración, como el aumento de aranceles a productos importados y las deportaciones masivas, que podrían generar presiones inflacionarias y frenar el crecimiento económico.