Martes 1 de abril de 2025
Estados Unidos busca obtener control sobre las principales inversiones futuras en infraestructura y recursos naturales en Ucrania, lo que podría otorgarle un derecho de veto sobre cualquier participación de los demás aliados de Kyiv y obstaculizar sus intentos de integrarse a la Unión Europea.
La administración del presidente Donald Trump está exigiendo un “derecho de primera oferta” en todas las inversiones de proyectos de infraestructura y recursos naturales en virtud de un acuerdo revisado de asociación con Ucrania, según un borrador del acuerdo obtenido por Bloomberg News.
De ser aceptado, este acuerdo otorgaría a EE.UU. un enorme poder para influir en las inversiones en Ucrania, abarcando proyectos de carreteras, ferrocarriles, puertos, minas, petróleo, gas y la extracción de minerales estratégicos. Esta medida representaría una expansión sin precedentes de la influencia económica de EE.UU. en el país más grande de Europa por superficie, justo cuando Ucrania intenta alinearse más estrechamente con la UE.
El acuerdo también permitiría a EE.UU. tener prioridad en las utilidades transferidas a un fondo especial de inversión para la reconstrucción, el cual estaría controlado por Washington. De manera significativa, el borrador establece que EE.UU. considera los “beneficios materiales y financieros” proporcionados a Ucrania desde la invasión rusa de 2022 como su contribución a dicho fondo.