El Departamento de Comercio de Estados Unidos reveló que, en noviembre, las ventas minoristas en el país aumentaron sorprendentemente un 0.3%, en comparación con octubre, contrariamente a las expectativas de una disminución. Estos datos reflejan el vigor de los consumidores estadounidenses, quienes continuaron gastando a pesar de las preocupaciones sobre la economía y los precios en alza.
Según las cifras actualizadas, las ventas por internet experimentaron un crecimiento del 1%, mientras que las ventas en tiendas físicas disminuyeron un 2.5%. Excluyendo las ventas de automóviles y gasolina, las ventas minoristas aumentaron un 0.6%, evidenciando la fortaleza de los compradores.
El informe destaca que, durante noviembre, los consumidores estadounidenses canalizaron su gasto hacia diversas categorías. El negocio en restaurantes registró un incremento notable del 1.6%, mientras que las ventas en tiendas de muebles crecieron un 0.9%. Las ventas por internet continuaron siendo un canal popular, con un aumento del 1%. Sin embargo, las ventas de electrónica y electrodomésticos disminuyeron un 1.1%, y las ventas en tiendas departamentales bajaron un 2.5%.
A pesar de los desafíos relacionados con el aumento de los costos de endeudamiento y los precios elevados, los consumidores estadounidenses parecen mantener su disposición para gastar. El fuerte mercado laboral, la positiva tendencia en los ingresos y cierto alivio en las presiones sobre los precios contribuyen a sostener el gasto y el crecimiento económico.
Rubeela Farooqi, economista jefe de Estados Unidos para High Frequency Economics, señaló que, aunque persisten obstáculos como el aumento de los costos de endeudamiento, las condiciones crediticias más estrictas y precios elevados, el mercado laboral sólido y la tendencia positiva en los ingresos continuarán respaldando el gasto y el crecimiento en el corto plazo. Los datos de empleo de noviembre mostraron la adición de 199,000 puestos de trabajo y una disminución en la tasa de desempleo al 3.7%.