Domingo 12 de enero de 2025
Los ministros de Finanzas del G20 concluyeron su reunión en Río de Janeiro este viernes, aprobando tres documentos que destacan las propuestas brasileñas para crear un impuesto a los ultrarricos y establecer una Alianza Global de Combate a la Pobreza y el Hambre. Estos temas fueron prioritarios para Brasil, que este año ejerce la presidencia temporal del foro, según el ministro brasileño de Hacienda, Fernando Haddad.
Haddad celebró estas menciones como “victorias importantes,” señalando que desde el inicio de la guerra en Ucrania en 2022, los ministros del G20 no habían emitido ninguna declaración consensuada. En Río, sin embargo, se logró aprobar un comunicado final de la reunión ministerial, que refleja las diversas preocupaciones de los miembros del foro.
El G20 endosó la propuesta de un impuesto a los ultrarricos, lo cual Haddad calificó como una “victoria moral” para Brasil. “El hecho de que esta propuesta esté en la declaración es algo que pocos imaginaban posible. Hoy consta en un documento oficial de las veinte naciones más ricas del mundo. Moralmente, es importante que estas naciones reconozcan que tenemos un problema cuando los pobres pagan más impuestos que los ricos,” afirmó.
Un estudio encomendado por Brasil indicó que si los aproximadamente 3,300 multimillonarios del mundo pagaran el 2% de sus riquezas en impuestos, se podrían recaudar anualmente entre 200,000 y 250,000 millones de dólares para financiar proyectos contra la pobreza, el hambre y el cambio climático.
Brasil también ha iniciado conversaciones con la ONU y la OCDE sobre posibles formas de implementación del impuesto. El G20 destacó la necesidad de combatir la evasión fiscal de los más ricos y mencionó estudios sobre la adopción de un impuesto universal sobre la riqueza de los multimillonarios.
En cuanto a la Alianza Global contra la Pobreza, una iniciativa lanzada por el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, el G20 manifestó la necesidad de ofrecerle apoyo técnico y financiero. El foro también respaldó la reforma de los bancos multilaterales de desarrollo para aumentar su eficacia y capacidad financiera, facilitando el acceso a crédito para los países más necesitados.
El comunicado ministerial del G20 refleja preocupaciones sobre la pobreza, el hambre, las desigualdades, el endeudamiento de los países más pobres y la crisis climática. También se comprometieron a cooperar para impedir la evasión fiscal de los ultrarricos y promover la tributación progresiva como una herramienta clave para reducir las desigualdades y fortalecer la sostenibilidad fiscal.
Los ministros del G20 señalaron que las perspectivas para la economía mundial son positivas, pero advirtieron sobre amenazas como las guerras, la fragmentación económica y los fenómenos climáticos extremos. Instaron a promover la cooperación internacional para impulsar el crecimiento y acabar con las desigualdades.
El G20 también se comprometió a regular y supervisar los criptoactivos y a mejorar el acceso a servicios financieros en las regiones más vulnerables para reducir la pobreza y promover el desarrollo económico sostenible.
El G20 está compuesto por Alemania, Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica y Turquía, además de la Unión Europea y la Unión Africana.
