Martes 24 de diciembre de 2024
Expertos señalan que las dinámicas económicas de Estados Unidos están experimentando un cambio significativo, con Nueva York y California perdiendo su estatus como principales potencias económicas frente a ciudades como Houston y Dallas. Estas localidades texanas, cada vez más atractivas para la industria tecnológica y energética, así como para emprendedores, ofrecen mayor calidad de vida, costos más bajos y beneficios fiscales.
Las ciudades costeras, que alguna vez fueron el epicentro de los negocios, están siendo desplazadas por el atractivo creciente de Houston y Dallas. La economía estadounidense se transforma, reflejando las oportunidades que presentan estas ciudades en términos de impuestos, calidad de vida, costos y capacidad para emprender, según el historiador Niall Ferguson.
Houston ya alberga a 26 empresas listadas en el Fortune 500, destacando como hogar de gigantes corporativos estadounidenses. Además, el 40% de su economía está vinculado al petróleo y gas, con empresas como ExxonMobil y ConocoPhillips. Además, se vislumbra un futuro prometedor para la industria espacial y las energías renovables, con proyecciones de inversiones anuales de $250 mil millones para 2040.
Por su parte, Dallas experimentó el mayor aumento de población del país entre 2021 y 2022, atrayendo a más de 17,000 nuevos residentes, según datos del Censo. La ciudad se posiciona como un polo para la industria tecnológica, con más de 175 empresas estableciendo sus oficinas principales en el norte de Dallas desde 2010, marcando un importante movimiento migratorio hacia la región.