La inversión de $1,615 millones por parte de la empresa turca YILPORT Holding Inc. para la modernización del puerto de Acajutla y la reactivación del puerto de La Unión, anunciada recientemente por el presidente Nayib Bukele, marca el inicio de la tercera fase del Plan Económico, enfocada en la logística. Esta iniciativa tendrá un impacto significativo en la producción nacional y en el comercio internacional, según Silvia Cuéllar, presidenta de la Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport).
Cuéllar calificó este proyecto como un avance positivo, destacando que la modernización de estos puertos dinamizará el comercio, mejorará el movimiento de mercancías y aumentará la capacidad del puerto de Acajutla, que ya ha experimentado un incremento del 13 % en la movilidad de contenedores durante 2024.
“El Salvador depende de la importación de materias primas para la producción y exportación. Ampliar la capacidad del puerto de Acajutla no solo beneficiará al mercado local, sino que también posicionará al país como un centro logístico para la región”, señaló Cuéllar.
La reactivación del puerto de La Unión también abrirá nuevas oportunidades para el sector exportador, facilitando el acceso a mercados internacionales, especialmente a través del Canal de Panamá. Esta conectividad permitirá diversificar destinos y reducir costos logísticos, lo que se traducirá en un impulso para las empresas locales.
Cuéllar también subrayó que el desarrollo de un polo productivo alrededor del puerto de La Unión atraerá nuevos inversionistas, fomentando el crecimiento económico en la región oriental del país. Estas expectativas coinciden con las declaraciones de la ministra de Economía, María Luisa Hayem, quien destacó que la modernización de los puertos reducirá costos y tiempos de transporte, beneficiando a la industria y potenciando las exportaciones hacia Centroamérica, Suramérica y otras regiones del mundo.
En resumen, la modernización de los puertos de El Salvador no solo fortalecerá la infraestructura logística del país, sino que también impulsará el comercio y la producción, consolidando al país como un actor clave en la región.
