Jueves 26 de diciembre de 2024
Redacción ||
El Gobierno panameño sostiene que los precios de los alimentos en el país no disminuirán, a diferencia de otros lugares que han experimentado un descenso tras el impacto de la pandemia y los conflictos en Ucrania. Los economistas locales atribuyen esta situación a la ausencia de una política agropecuaria y a la presencia de monopolios en la distribución e importación.
En declaraciones, Augusto Valderrama, Ministro de Desarrollo Agropecuario, afirmó: “Los precios de los alimentos no van a bajar y aquellos que sugieran lo contrario están difundiendo información falsa”, atribuyendo la situación a las leyes de oferta y demanda.
De acuerdo con las estadísticas oficiales, en junio pasado, el índice de precios de alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó un 3.4% en comparación con el mismo mes de 2022.
A pesar de tener una población de 4.2 millones de habitantes y una informalidad cercana al 50%, en Panamá la mayoría de los salarios mensuales rondan los $380, con ajustes no indexados a la inflación, situándose entre los más bajos de la subregión.
El precio promedio de la canasta básica de alimentos en junio cerró en $290.17, con un incremento de $4.25 en comparación con el mismo mes del año anterior, según la Autoridad de Protección al Consumidor (Acodeco).
Análisis económicos efectuados en los últimos dos años sugieren que los precios de los alimentos deberían haber mejorado. Sin embargo, el Ministro Valderrama expresó que no comparte esta perspectiva y sostiene que las distorsiones provocadas por la pandemia y la cadena global de suministros, así como el aumento de los fletes de importación y los precios del crudo debido a la situación en Ucrania, no están afectando la tendencia alcista.
Carlos Araúz, analista financiero y empresario, discrepa y señala que las distorsiones de mercado, posiblemente causadas por oligopolios y monopolios, están impidiendo que los precios de los alimentos bajen en Panamá.
El economista Felipe Argote indica que el mercado en Panamá está cerrado y que solo se importan deficiencias en la producción local. Argote sostiene que los precios de los alimentos podrían bajar si se abren los mercados y se fomenta la competencia.
El decano de la Facultad de Economía de la Universidad de Panamá, Rolando Gordón, menciona que la falta de una política agropecuaria y el sistema de subsidios estatales a una producción ineficiente son factores clave que impiden la reducción de los precios de los alimentos.
Los expertos consultados sugieren que el Gobierno debería promover la tecnificación del sector agrícola, fomentar el cooperativismo y aplicar intervenciones temporales para garantizar una dieta asequible.