La tasa de desempleo en Estados Unidos subió una décima en mayo con respecto a abril, alcanzando el 4 %, informó este viernes la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos. Esta cifra es la más alta desde enero de 2022.
Sin embargo, tras un desplome en abril que dejó la creación de nuevos puestos de trabajo en 165,000, mayo registró una recuperación significativa con 272,000 nuevos empleos creados, 107,000 más que el mes anterior.
Esta cifra supera los 232,000 puestos de trabajo mensuales creados en promedio durante los últimos doce meses, reflejando la fortaleza del mercado laboral estadounidense, un dato crucial para la Reserva Federal en su análisis para decidir cuándo empezar a bajar los tipos de interés.
La solidez del mercado laboral, con cifras de desempleo por debajo del 4 % en los últimos años, ha sido uno de los principales logros del presidente Joe Biden, quien buscará la reelección el próximo 5 de noviembre. El empleo continuó en aumento en varias industrias, lideradas por la atención médica, el gobierno, el ocio y la hostelería, y los servicios profesionales, científicos y técnicos, según la BLS.
En mayo, el número de desempleados se situó en 6.6 millones. Hace un año, la tasa de desempleo era del 3.7 % y el número de desempleados era de 6.1 millones.
Los ingresos medios por hora de todos los empleados en nóminas privadas no agrícolas aumentaron 14 centavos o el 0.4 %, hasta los 34.91 dólares. En los últimos 12 meses, el salario medio por hora ha subido un 4.1 %. Los datos del desempleo se publican una semana antes de que la Reserva Federal (Fed) se reúna para decidir si inicia la reducción de los tipos de interés, proceso ya iniciado esta semana por el Banco Central Europeo (BCE).
La próxima semana se conocerán también nuevos datos de inflación. Los últimos disponibles son los correspondientes al mes de abril, cuando la tasa cayó una décima hasta el 3.4 %, tras dos meses de subidas consecutivas.
Esta fue la primera bajada de los precios en tres meses, confirmando la advertencia del presidente de la Fed, Jerome Powell, de que reducir la inflación de manera sostenida será un desafío.
Tras once subidas desde marzo de 2022, la Fed ha mantenido los tipos de interés desde julio del año pasado en una horquilla de entre el 5.25 % y el 5.5 %, su nivel más alto desde 2001.
En sus últimos actos públicos, Powell ha reiterado que es “probable” que la institución mantenga los tipos de interés en su nivel actual en la próxima reunión que se celebrará el 11 y 12 de junio, insistiendo en que estos deberán seguir altos durante más tiempo del esperado.
Powell afirmó que se necesitan más datos económicos para determinar si la inflación será más persistente de lo anticipado y si llevará más tiempo reducirla al objetivo del 2 %. Sin embargo, enfatizó que la tasa no tiene por qué llegar al 2 % para que se consideren las bajadas de tipos, dado que no estaba en ese nivel antes de la pandemia.
Para decidir cuándo es el momento de bajar los tipos, la Fed tendrá en cuenta datos macroeconómicos como el desempleo, la inflación o el índice de precios en gastos de consumo personal (PCE), que en abril se mantuvo en el 2.7 % interanual, respecto a marzo.