Sábado 11 de enero de 2025
Las acciones de CrowdStrike se desplomaron un 12% esta mañana, mientras que las de Microsoft solo bajaron ligeramente un 0,07% en Wall Street. Este movimiento en el mercado se produjo después de que una actualización defectuosa de la empresa de ciberseguridad causara incidencias en instituciones a nivel global.
Diez minutos después de la apertura del mercado neoyorquino, las acciones de CrowdStrike, que cotiza en el Nasdaq, se vendían a 303 dólares cada una, mientras que las de Microsoft costaban 440 dólares. Antes de la apertura, CrowdStrike había caído un 14% y Microsoft casi un 3%.
El consejero delegado de CrowdStrike, George Kurtz, aclaró que el problema ya está solucionado y que no se trató de un ciberataque, sino de un error de software en la actualización que afectó al sistema operativo de Microsoft.
El fallo sembró el caos en bancos, instituciones, organismos y hospitales a nivel mundial. Incluso el sistema informático de las Olimpiadas de París 2024 se vio parcialmente afectado, impidiendo la entrega de uniformes y acreditaciones.
El sector más afectado fue el aéreo, con más de 22.000 vuelos retrasados y 2.100 cancelados en todo el mundo. De estos, más de 1.200 vuelos tenían origen o destino en Estados Unidos, según la plataforma de seguimiento de vuelos FlightAware. Varias grandes aerolíneas estadounidenses, incluyendo Delta, United y American Airlines, detuvieron todos sus vuelos en la madrugada del viernes, aunque ya han reanudado sus operaciones.
En EE.UU., agencias de transporte como la Autoridad Metropolitana de Tránsito de Nueva York experimentaron problemas en sus páginas web y aplicaciones. Los sistemas sanitarios también sufrieron interrupciones en algunos servicios debido al apagón en los ordenadores con Windows.
En Europa, numerosos aeropuertos se vieron afectados, incluyendo Heathrow, Luton, Gatwick, Stansted, Edimburgo, Manchester, Roma, Schiphol, Berlín, Zurich y Cracovia.
Microsoft informó en una publicación en X que la causa principal del problema se ha solucionado, pero que el “impacto residual” continúa afectando a algunas aplicaciones y servicios de Microsoft 365.