El Salvador ha lanzado una ambiciosa estrategia para convertirse en un hub logístico en la región, con la modernización del puerto de Acajutla y la activación del puerto de La Unión como pilares fundamentales. Estas iniciativas forman parte de la tercera fase del Plan Económico, enfocado en logística, y buscan fortalecer la facilitación del comercio en el país.
La ministra de Economía, María Luisa Hayem, explicó que la modernización del puerto de Acajutla se llevará a cabo en varias fases, lo que no solo aumentará la competitividad de El Salvador, sino que también reducirá tiempos y costos asociados al comercio. “Esto se traducirá en beneficios microeconómicos, como la reducción de precios en la canasta básica, y en mejoras macroeconómicas, posicionando al país como un destino atractivo para la inversión”, señaló Hayem en una entrevista para Noticiero El Salvador.
El proyecto será posible gracias a una alianza de economía mixta entre el Gobierno de El Salvador y la empresa Yilport Holding Inc, que invertirá $1,615 millones en la Unión Portuaria del Pacífico. Esta inversión promete generar un impacto positivo en la economía nacional, creando nuevas oportunidades de empleo y mejorando la calidad de vida de los salvadoreños.
Además, la facilitación del comercio es una estrategia clave del Gobierno para posicionar a El Salvador como un centro logístico en Centroamérica, permitiendo un intercambio más fluido de mercancías entre el país y el resto del mundo. “Nuestro objetivo es consolidarnos como un hub logístico en la región”, reiteró Hayem.
Hasta la fecha, el Plan Económico ha anunciado tres fases principales: Alimentación, Tecnología y Logística, todas enfocadas en transformar a El Salvador en un país más competitivo y atractivo para la inversión extranjera.
