Lunes 30 de diciembre de 2024
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha anulado este viernes los acuerdos comerciales de 2019 entre la Unión Europea (UE) y Marruecos en materia de pesca y productos agrícolas, alegando que el pueblo del Sáhara Occidental no otorgó su consentimiento para estos convenios.
Sin embargo, en lo que respecta al acuerdo de liberalización agrícola, el TJUE ha decidido mantenerlo vigente durante doce meses, considerando las serias consecuencias que tendría su anulación inmediata para la acción exterior de la UE y por motivos de seguridad jurídica.
En 2019, el Frente Polisario, que sostiene representar al pueblo saharaui, interpuso ante el Tribunal General de la UEuna serie de recursos para anular los acuerdos sobre pesca y agricultura entre Marruecos y los Veintisiete. El Tribunal General ya había dictado en 2021 la anulación de los convenios, aunque con efectos temporales, al considerar que no se había obtenido el consentimiento del pueblo del Sáhara Occidental.
Recursos desestimados
La Comisión Europea y el Consejo de la UE recurrieron esa decisión ante el TJUE, que es la máxima instancia judicial de la UE. En la sentencia dictada hoy, el TJUE desestimó los recursos de ambas instituciones, subrayando que la validez de los acuerdos requería el consentimiento del pueblo saharaui para su aplicación en este territorio no autónomo.
El Tribunal reconoció que, aunque se realizaron consultas antes de la aprobación de los acuerdos, estas no fueron dirigidas al pueblo del Sáhara Occidental, sino a las poblaciones presentes en el territorio, lo que no acreditaba un consentimiento válido. Además, aunque el consentimiento no siempre tiene que ser explícito, puede presumirse si el acuerdo no impone obligaciones al pueblo en cuestión y les otorga beneficios claros derivados de la explotación de sus recursos naturales.
En este caso, el TJUE determinó que los acuerdos no imponían obligaciones jurídicas al pueblo del Sáhara Occidental ni les conferían derechos o beneficios, ya que no recibieron contrapartidas financieras por la explotación de sus recursos. Por lo tanto, el consentimiento no podía considerarse presumido.
La decisión del TJUE es definitiva y no admite recurso. Expertos en el tema han indicado que, aunque los acuerdos quedan anulados, la sentencia contiene elementos que podrían facilitar futuras negociaciones entre la UE y Marruecos sobre el Sáhara Occidental, siempre que se especifiquen las ventajas para el territorio.
Reacciones a la sentencia
A pesar de la decisión del TJUE, la Comisión Europea manifestó su intención de seguir fortaleciendo la relación con Marruecos. La portavoz de la Comisión, Nabila Massrali, comentó que están analizando la sentencia y valoraron positivamente la prórroga del acuerdo agrícola por 12 meses.
Por su parte, Marruecos ha exigido a la Comisión y al Consejo de la UE que adopten las medidas necesarias para cumplir con sus compromisos internacionales y preservar la asociación bilateral tras la anulación de los acuerdos. En un comunicado, el Ministerio de Exteriores de Marruecos recordó su posición de no suscribir acuerdos que no respeten su integridad territorial.
En el ámbito del sector agrario español, la sentencia ha sido recibida con satisfacción, mientras que la flota pesquera ha expresado su descontento. Los representantes de los agricultores y exportadores han aplaudido la decisión, mientras que los armadores han lamentado la pérdida de un acuerdo que proporcionaba un centenar de licencias, especialmente en regiones como Andalucía, Galicia y Canarias. El secretario general de Cepesca, Javier Garat, calificó la sentencia como un “nuevo golpe” para el sector pesquero en un momento ya complicado debido a recortes propuestos en la pesca del boquerón y dificultades en la captura de sardinas.