Martes 24 de diciembre de 2024
K1, una empresa salvadoreña que se dedica a la construcción y exportación de cajeros bitcoin, ha experimentado un crecimiento significativo gracias a una inyección de capital proveniente de inversionistas extranjeros. Esta inversión ha permitido fortalecer las operaciones de la compañía en el país.
Según explicó Edgar Borja, CEO de la empresa, durante el año 2023 iniciaron la búsqueda de capital con el objetivo de aumentar su producción. Este proceso culminó en noviembre con la firma de dos acuerdos financieros: uno de $150,000 con un fondo de inversión estadounidense y otro de $110,000 con un inversionista suramericano.
Gracias a la adquisición de estos fondos, K1 ha podido expandir su equipo este año y ha comenzado a trabajar en nuevas instalaciones. Su meta es construir alrededor de 200 cajeros para el cierre de 2024, alcanzando un total de 300 artefactos colocados tanto dentro como fuera del país.
Borja destacó que su tecnología está presente en varios países, incluyendo Estados Unidos, Japón, México, Colombia, Ecuador, Austria, Francia, Italia y Suiza. Actualmente, la mayoría de los cajeros están ubicados en Estados Unidos, El Salvador y en países europeos.
Aunque cuentan con varios clientes en el territorio salvadoreño, la empresa está recibiendo los pedidos más grandes del extranjero y se está preparando para satisfacer esta demanda. El precio de sus productos oscila entre $1,200 y $1,850.
El objetivo principal de K1 es facilitar la incursión de los salvadoreños en bitcoin, ofreciendo un espacio donde puedan ahorrar en cantidades pequeñas. Esto se alinea con la visión del presidente Nayib Bukele de cubrir a toda la población no bancarizada y promover la inclusión financiera en el país. Borja destacó que los cajeros bitcoin están teniendo un impacto significativo en comunidades donde antes era difícil acceder a servicios financieros, permitiendo a las personas realizar transacciones de forma más rápida y conveniente.