Miércoles 15 de enero de 2025
En los últimos años, la inteligencia artificial (IA) ha desencadenado una transformación significativa en la banca tradicional, revolucionando la forma en que se procesan las transacciones y se interactúa con los clientes. Esta modernización ha permitido a las empresas y consumidores experimentar un procesamiento de datos más rápido y el uso de bots de IA para asistencia virtual, entre otros avances.
La incorporación de tecnologías como los pagos sin contacto, las carteras y tarjetas digitales, y las aplicaciones bancarias para pagos QR ha facilitado una integración más profunda del ecosistema financiero, promoviendo una hiperpersonalización en los servicios. Por ejemplo, en América Latina, las tarjetas de crédito representaron el 48% de los pagos en 2023, aunque esta cifra está cediendo terreno a métodos alternativos como las transferencias, el “compre ahora y pague después” y los monederos digitales. Estas innovaciones han permitido a los bancos mejorar la experiencia del cliente adaptando los servicios a sus necesidades individuales.
A pesar de estos avances, la industria bancaria sigue enfrentando varios desafíos importantes:
Para respaldar estos avances, las organizaciones deben contar con sistemas de alimentación ininterrumpida y soluciones de refrigeración eficientes, elementos esenciales para mantener la continuidad del servicio. Una infraestructura digital crítica sólida permitirá a los bancos integrar nuevas tecnologías y ofrecer servicios diferenciados, manteniendo así una ventaja competitiva.
La transformación digital ha diversificado y modernizado la oferta de servicios bancarios, haciendo que los bancos sean más ágiles y adaptados a las necesidades cambiantes de los clientes. Neobancos, blockchain y fintechs están desafiando el status quo con enfoques centrados en el cliente y estableciendo nuevas expectativas.
La IA, en particular, está revolucionando el sector bancario mediante el uso de interfaces de programación de aplicaciones (API) de IA. Esto incluye chatbots inteligentes y asistentes virtuales capaces de resolver problemas complejos rápidamente, así como la automatización de tareas rutinarias en la gestión de back-office.
Los bancos que desean liderar esta nueva era deben adoptar tecnologías innovadoras y estar preparados para el futuro con una infraestructura digital crítica robusta y segura. Esto incluye soluciones de energía y refrigeración que soporten aplicaciones digitales modernas. Para conocer más sobre cómo crear una infraestructura digital crítica adaptada al futuro para la banca, visite Vertiv.com.
Sobre el autor
Silvia Córdoba es gerente de cuentas premium de Vertiv en México, Colombia y Ecuador. Con tres años de experiencia en Vertiv, se especializa en el desarrollo de negocios para soluciones y servicios de infraestructura de TI, administración térmica, y administración de energía. Silvia tiene un título en Ingeniería Electrónica y de Comunicaciones por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey y un máster en Administración de Empresas y Finanzas por Tecmilenio.