La economía global sigue en una fase de desaceleración, aunque mantiene un crecimiento positivo gracias a la disminución progresiva de las tasas de inflación en los últimos meses.
En este contexto, MAPFRE Economics, el Servicio de Estudios de MAPFRE, anticipa un crecimiento del 3 % para 2024 y del 2,9 % para 2025, superando el 2,6 % esperado en previsiones anteriores para ambos años.
A pesar de los avances, la inflación no ha descendido completamente hasta el objetivo y se prevé que se sitúe en el 4,5 % en 2024 y en el 3,5 % en 2025.
Entre los obstáculos, se destacan las presiones en los servicios y los ajustes salariales por el lado de la demanda, así como desafíos en la oferta, como la disrupción de las cadenas de suministro relacionadas con la crisis del Mar Rojo y la evolución de los precios de las materias primas.
Las particularidades de cada región provocan que el panorama de la inflación presente realidades muy diversas en todo el mundo, con niveles de evolución dispares.
