Viernes 10 de enero de 2025
A pesar del aumento del precio de la gasolina en Venezuela hace más de tres años, el contrabando y la reventa interna del combustible persisten, según expertos. En mayo de 2020, el Gobierno venezolano aumentó el precio de la gasolina a 0,5 dólares en algunas estaciones de servicio, mientras que en otras estableció una tarifa subsidiada en bolívares, equivalente a 2 centavos de dólar, con un límite de compra mensual de 120 litros.
La economista sénior de Ecoanalítica, Graciela Urdaneta, señaló que estos precios, más bajos que los de países vecinos, continúan favoreciendo el contrabando. Aunque se implementó un ‘plan antimafias’ en 2022 para combatir estas irregularidades, el contrabando persiste.
El informe de Ecoanalítica y Transparencia Venezuela destaca que Venezuela tiene la gasolina más barata del continente, lo que crea un diferencial de precios propicio para el contrabando, especialmente hacia países vecinos como Brasil y Colombia.
La experta menciona que el fin del histórico subsidio a la gasolina en 2020 generó pérdidas millonarias al Estado venezolano, que no pudo sostener más esta ayuda debido a la caída en la producción petrolera y de refinación. Actualmente, hay más estaciones de servicio que venden gasolina a precio no subsidiado que a precio subsidiado.
El porcentaje de suministro de gasolina subsidiada ha disminuido considerablemente, pasando del 72 % en mediados de 2020 a aproximadamente el 25 % el año pasado, según el informe.