Jueves 26 de diciembre de 2024
La NASA ha lanzado un nuevo satélite, denominado PREFIRE, diseñado para medir con detalle por primera vez la pérdida de calor hacia el espacio desde los polos de la Tierra. Este satélite, del tamaño de una caja de zapatos, despegó el sábado desde Nueva Zelanda a bordo de un cohete Electron de la empresa Rocket Lab.
El objetivo de la misión PREFIRE es proporcionar a los científicos una nueva información que les permita mejorar sus modelos climáticos y sus previsiones relacionadas con el cambio climático. Karen St. Germain, directora de investigaciones científicas de la NASA, destacó la importancia de estos datos para comprender mejor lo que está ocurriendo en los polos y en el clima global.
El satélite realizará mediciones en el infrarrojo lejano sobre el Ártico y la Antártida, permitiendo cuantificar directamente por primera vez el calor liberado al espacio desde estas regiones polares. Tristan L’Ecuyer, director científico de la misión, explicó que este fenómeno es crucial para equilibrar el exceso de calor recibido en las regiones tropicales y regular la temperatura de la Tierra.
PREFIRE también proporcionará información sobre cómo las nubes, la humedad y otros factores influyen en esta pérdida de calor, lo que ayudará a mejorar la capacidad de simular el aumento del nivel del mar y entender cómo el cambio climático en los polos afecta los sistemas meteorológicos del planeta.
Este satélite se suma a más de una veintena de misiones de observación de la Tierra llevadas a cabo por la NASA, marcando un avance significativo en el estudio del cambio climático desde el espacio. Los satélites pequeños, como el PREFIRE, representan una oportunidad valiosa para responder preguntas específicas a menor costo, complementando el trabajo de los satélites más grandes y tradicionales.